El sol ha desaparecido tras las cima del jabwi, y la sombra de esta montaña envuelve con un velo de crespón a la perla de las ciudades de Orisa, a la gentil Kattak, que duerme a sus pies, entre los bosques de canela y sicomoros, semejantes a una paloma que descansa sobre un nido de flores.
(Las leyendas de Bécquer)
El señor Jones, propietario de la Granja Manor, cerró por la noche los gallineros, pero estaba demasiado borracho para recordar que había dejado abiertas las ventanillas.
(Rebelión en la granja)
Julio se había extinguido como una vela ante el viento cortante que nos trajo un plomizo cielo de agosto.
(Mi familia y otros animales)
Yo, señor, no soy malo, aunque no me faltarían motivos para serlo.
(La familia de Pascual Duarte)
Y este –dijo el doctor Simiak- es el transmisor de materia. Rudolf Hefting contempló impresionado la enorme máquina que cubría todo un muro del laboratorio.
(Cruzadas en jeans)
(Las leyendas de Bécquer)
El señor Jones, propietario de la Granja Manor, cerró por la noche los gallineros, pero estaba demasiado borracho para recordar que había dejado abiertas las ventanillas.
(Rebelión en la granja)
Julio se había extinguido como una vela ante el viento cortante que nos trajo un plomizo cielo de agosto.
(Mi familia y otros animales)
Yo, señor, no soy malo, aunque no me faltarían motivos para serlo.
(La familia de Pascual Duarte)
Y este –dijo el doctor Simiak- es el transmisor de materia. Rudolf Hefting contempló impresionado la enorme máquina que cubría todo un muro del laboratorio.
(Cruzadas en jeans)
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